Mil gracias, Gali!
Muchas gracias, Sin! Abrazos cariñosos también para ti, amiga.
Hermosamente fotográfico!!! El final una pincelada divina.
Saludos María
Bonito, bonito, María. Abrazo y buen día
¡Buuff! ¡Qué bonito!
Gracias, amigo! Saludos Martín!
Cuando hice el poema, “este bosque” se lo disputaban los pájaros negros haciendo tanto ruido y aún siguen…
Gracias por leerlo, amigo!
Gracias, amigo! Los pájaros negros siguen ahí, al acecho…
Abrazos!
Un pájaro a contracorriente, un pájaro cuya personalidad le aparta del mundo negro que habitan las aves que no tienen colores, todas iguales, impersonales y carentes de emociones, que jamás disfrutarán la libertad de ese pájaro que vuela sólo. Has plasmado muy bien ese mundo de libertad que transita el pajarillo. Gran poema, pleno de hermosura y sencillez, pero con una gran enseñanza en su interior. Un saludo María.
En realidad era una metáfora menos tierna y más mundana, pero tu versión también está implícita en esos versos, ya sabes lo que significa la naturaleza para mí…
Muchísimas gracias por ello, amigo! Buenas noches! Mañana espera un día largo…
Gracias, Paco. Buena noche!