Proyecta
su
luz de nácar
la
dulce sonrisa,
cuando atractiva y seductora
cala
la ansiedad de mi alma,
atrofia el miedo,
despierta
mohínos sueños
e inocula en mis arterias
felicidad de amor sagrado
que brota, crece y crece
abonado por comprensión,
bondad,
mimos,
ternura,
y acaramelados, vivos
en el tiempo
de los años viejos
donde
la tristeza exige
compañía
feliz
a diario.
La edad solapadamente,
feroz,
niega
lucidez a la lógica,
la triste apatía invade,
su alegre vida
y
lleva
conciencia de su dolor
y mi alma se desmorona
lentamente.
Tan
grande es la pena, que rechaza
toda fragilidad
que
niega el dolor
opuesta a todo aquello cruel,
terror
que en ese lóbrego planeta
orbita entre añejos recuerdos
que alteran,
el sosiego y el sueño
se ama u olvida,
hoy.
Y
para preguntas
al mundo que no responde,
clama
y
la vida remeda tristezas
le deja desvalida,
inocente,
incapaz de enhebrar memorias,
dependiente
de otra mano
que la proteja
como a los bebés indefensos.
¡Dios!
¡Cuánto silencio!
y
¡Caos, oscuridad!
¡Ya no recuerda quién soy!
mas
¡Cómo olvidarla yo!
Gracias querida amiga, podría llamarse “Nueve años después” es una mezcla de vivencias, mi madre 13 años con Alzheimer y situaciones actuales.
Un abrazo grande.
Vaya buen trabajo que has hecho en la forma y en el fondo!!!
Hermoso y emotivo poema a eso tan terrible de la pérdida de memoria en nuestros seres queridos. Está hecho con mucha ternura y cariño…
Hemos coincidido esta vez, amigo, en el tema de nuestros poemas, el mío también está dedicado al olvido.
Muchos besitos, Edel!!
Edel, ese Mepi 70 te ha quedado como una joya de altos quilates.
Lo copio y guardo para releerlo después con más tiempo y despacio.
Me encantó
La foto me ha hecho recordar un cuento, que ya te comentaré en otra oportunidad.
Felicitaciones, amigo.
Abrazo
¡Qué efervescencia su letra! De ternura, de agua, sobre la mancha vida.
¡Gratísimo! ¡Gratísimo!
Un gran saludo, desde “La Corporación”, El Agustino, distrito de Lima.
Un gran trabajo poético (esos mepi son muy difíciles) y un gran sentimiento reflejado.
Yo también lo he vivido con mi madre y sé bien de qué hablas, amigo.
Abrazo, Edel .
Un emotivo Mepi con una situación muy dramática subyacente, con ese triste final:
“Caos, oscuridad!
¡Ya no recuerda quién soy!”,
Abrazos para ti y los tuyos
No saben amigos, @mariaprieto; @Saltamontes & @Rraffa cuánto aprecio su visita y hermosos comentarios. Y Pedro, la foto es de una historia real, el taxista que no consiguió quién el cuidadara a la esposa enferma de alzheimer y se la llevaba todo el rato de copiloto.
Un abrazo grande desde Tenerife
Quisiera poder acogerlos a todos en un abrazo grande de agradecimiento, @wallacegere; @carlogaru20 & @varimar pero de a tres será más apretado, me emocionan con sus lindos comentarios.
Gracias desde Tenerife
Gracias Domingo, sabes que significa mucho par mi tu comentario como creador junto a Alejandro de esta estrucura poética, lo dicho son pensamientos apretados que una vez liberados saltan disparado en versos que en el mepi he enjaulado. Gracias.
Sois muy amables conmigo, amigos míos, vuestra visita y comentarios son muy importantes para mi. Se basa en hechos reales, Pedro. Y de ti, Juan Carlos, he aprendido del Mepi, tu influencia en el mismo junto a Domingo y Alejandro en una estructura que me gusta mucho.
Gracias , un abrazo grande.