Si tuviera una tiza…
Dibujaría un corazón,
allá arriba, en el cielo que oscurece…
∼
Oscuro…, de gris plomo,
que amenaza, que se enfurece.
Que se desborda casi negro…
∼
Negro inmisericorde,
que se traga la luz…
sin masticar…
Sin respirar.
∼
Respira el viento y se agita…
Zarandea, empuja y avasalla,
con una furia sincera…
∼
Sincera, furiosa, iracunda…
de un portazo la luz se marcha…
Se va sin despedirse y aprieto el paso…
Amedrentado.
∼
Amedrenta, espanta, acobarda…
entrecomillado “acongoja”
El cielo se parte y alborea…
Me envuelve el estruendo
y levanto la mirada…
∼
Mirando allá arriba,
contemplo tu nombre
que se borra, que se escurre,
se disuelve…
∼
Y yo…
Si tuviera una tiza…
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Original esa concatenación de finales y principios de versos. Buen poema, compañero.
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