Vuélvete la caricia. No quiero que limites
tus ojos en mi cuerpo. Mi senda es el espacio.
Recorrerme es huirse de todos los senderos…
Soy el desequilibrio danzante de los astros.
Para hallarte esta noche
de Julia de Burgos
Tengo sed de tu mirar;
como agua mansa
apareces,
entre la niebla de mis nubes.
Encontré lluvia
con los ojos anegados,
el halo de la luna
acuna mi fragilidad,
los pétalos cosidos
a la espalda de la melancolía,
sobre una breve palabra
no escrita.
Tengo en mi alma
estos inmensos infinitos versos,
que corren por las venas
del universo,
guardado en los pliegues de mi sentir.
Gota esencia de vida
que se vuelve tristeza.
Cuando navega en
cualquier océano,
rosa de agua
mis pasos no encuentran
la otra orilla,
y ando calada de versos salados.
Me gustó la alusión a Juana de Burgos (de Carolina, Puerto Rico) ella escribió también:
«Mis espigas no quieren germinar al futuro.
¡Oh el peso del ambiente!
¡Oh el peso del destierro!»
Aplausos.
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