Un niño

Surge una efímera ave en la silueta de un fósforo,
abroquelada en la cavilación de mis días.
Aquellos días que restan por ahuyentar
las canas de mis abismos.

Pienso, releyendo, aguantando un sismo,
en el latón de mis silencios, como si fuese un arlequín,
el alma de un higo…
Pienso y sigo releyendo, busco reencontrarme.

Hay crucigramas que no son de papel,
y vientos que no son del norte de mi imaginación.
Tres días caminé y planeé soltar mi aguerrido caballo
de tres cabezas en esa mínima plegaria para vencer…
Y aún no regresa, aún tengo un ábaco de colores haciendo
cuentas de la lluvia que también falta por regresar.

Pienso, y luego recito lo que ya encontré
lo que no imaginaba hallar. Un niño en blanco y negro.

:camera: William Gedney

niño sed

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Soberbio poema.
Un abrazo.
Andrés.

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Muchas gracias por la bondad de su comentario! Feliz fin de semana!

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Superlativo!

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Muchas gracias, mi querida poetisa!

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Bellísimo poema, con esa lírica tan tuya, tan personal, tan poética, un placer de lectura poeta!!! Abrazos!!!

Uff, hermoso, hermoso!!!

“Pienso, releyendo, aguantando un sismo,
en el latón de mis silencios, como si fuese un arlequín,
el alma de un higo…
Pienso y sigo releyendo, busco reencontrarme.”

Magnífico poema. Saludos cordiales.

Magnífico compañero.
Un abrazo.

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Uff, precioso. Abrazos cariñosos.

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Muchas gracias, querida poetisa!

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Enorme este poema, Héctor! Ese niño en blanco y negro…
La iconografía magnífica!
Abrazos, poeta!

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Muchas gracias, querida poetisa! :hugs: :bouquet: :wine_glass:

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Muchas gracias mi querida poetisa por la observación lírica de este sencillo poema! Mis saludos afectuosos!!

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