Ahí estaba
al borde de mi universo
te espero en la profundidad
de un sentimiento.
. . . Y nos volvemos
más humanos,
cuando una lagrima,
se desliza por el
acantilado de una mejilla
enamorada.
Cerro sus pupilas
brillantes,
tirito la tierra
gimió las estrellas
entreabrió su boca
me beso
. . . y se movieron las entrañas,
como melodía,
como la luz tenue
de una luna peregrina,
descubriendo
los misterios
de su universo.
Pinterest
No cito ninguna estrofa, porque me gusta todo.
Gracias, me alegra que te guste.
Hermoso de principio a fin. Saludos cordiales. 
Qué maestría para escenificar cada verso y sentir. Simplemente gracias, querida Magda. 
¡Qué belleza! 
@Magdalena
Ahí estaba
al borde de mi universo
te espero en la profundidad
de un sentimiento.
Ufff que arranque…
Para mí, eso de sentarse al borde del universo es una entrada galáctico-triunfal para un poema.
Alguna vez también, abrí uno o dos, sentado a la orilla de esta galaxia…
A mí me saben a explosión big-bang-esca las siguientes imágenes poéticas en tu espléndido poema…
una lagrima,
se desliza por el
acantilado de una mejilla
gimió las estrellas
entreabrió su boca
me beso
Gracias, por leer y comentar. Saludos
Gracias, que bien que te guste
Un abrazo
Gracias, Alex
Un abrazo.
Que alegría me das, Alejandro
Todo un placer tu comentario.
Gracias
Pero qué bonito has contado el nacimiento de ese beso.
Así no hay tierra ni universo que se resista
Gracias, un montón de besos
Un gusto leerte.
Espero que te encuentres muy bien.
Es un bellísimo poema.
Un abrazo, Magdalena.
Cuídate mucho. Que estés bien.
De principio a fin pero el finsal mucho mejor.
Gracias por leer y comentar.
Un abrazo fuerte
Gracias, me alegra que te guste.
Un abrazo
Me encanta! Es una belleza
Precioso! 
Gracias, Galilea, por por lectura