Sus ojos

Les confieso que he muerto
en el delirio de sus ojos
que marcaron mi piel y mis sentidos.
Lo adoraba por completo
cada milímetro de su cuerpo
pero sus ojos eran mi locura y consuelo,
todo al mismo tiempo.
No sé si era lo que decían
o su forma de mirar
o lo que yo sentía,
solo sé que me miraba
y en ese instante yo desfallecía.
Su color era hermoso
y acompañando su mirar
sus pestañas onduladas
y sus cejas precisas,
desordenadas y locas
como él mismo.
Sus ojos eran reflejo de su interior,
tenían ternura y fuerza
pero también duda y desorden,
desazón.
Eran todo de él y los amé
como amé su palabra.
Sus ojos eran mi poesía
mi alfabeto
las letras mudas y cerradas
fonemas de pasión.
Sus ojos eran la lluvia
las gotas cristalinas
del cielo llorando
y eran del verano el sol.
Eran el silencio profundo
y el alarido perturbador.
Su mirar desbarataba el peligro
la falta de flujo sanguíneo
daba aliento y razón.
Y cerrados esos ojos
eran un sueño
eran la paz del desvarío
eran la inhalación del amor.
Sus ojos eran la vida
y le daban vida a los míos
le daban latir a mi corazón.
Por eso cuando se apagaron
se apagó mi esperanza
y el día para mi desapareció.
La ausencia de sus ojos
silenció mi silencio
más allá de lo imaginable
que infartó mis venas
y deshizo mis huesos.
Cambió la visión de mis ojos
abriendo los lagrimales
como manantiales
y me volvió delirante
traspasada con el embrujo
de su mirada como una maldición.
La ausencia de sus ojos
escribió jeroglíficos en mis pupilas
haciéndome vagar
insana por la vida
buscando descifrar
el lenguaje del adiós.

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Nostálgico y hermoso poema. Saludos poéticos.

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Gracias @Sinmi , por leer y visitarme.

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Que bello poema, que bien que estes de vuelta Aurora !!! , maravilloso !!Un gran abrazo mi querida amiga !!

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