Estoy condenado a ser
un simple mortal
persiguiendo su sueño…
no soy un empresario
de imperios,
no soy catedrático
que siente cátedra,
no soy científico, ni matemático
que enmudezca el mundo,
no soy sacerdote, ni obispo, ni cardenal
que sus miedos esconde
en el confesionario
y sus sentimientos
bajo la sotana…
solo soy un simple escribano
que va de un sitio a otro
mirando los sueños de otros
construyendo mi sueño
con palabras terminales.
Poemario Trinchera Infinita
Pippo Bunorrotri