Soy la luz que resbala de tus ojos,
los despojos de sueños,
lo que quedan al día siguiente
y que no recordarás.
Soy la sombra de los pasos,
que se detienen a esperar
el color de tu regreso.
Soy casi lo que esperas,
casi lo que tengo,
casi soy los anhelos.
Soy las desgracias,
las luchas, los reflejos,
las tristezas y los miedos,
el dolor de detrás de los parpados.
Soy quien dije ser,
y aunque parezca mentira,
soy al menos los extractos de tu dicha.