En todos los rincones de la tierra,
dicen los entendidos, cuecen habas,
es decir que nos ponen tantas trabas
que vivir sin conflictos les aterra.
Igual con el negocio de la guerra
en maitines nos meten por las bravas,
viendo como tu propia fosa cavas
a golpe de martillo, escoplo y sierra.
Porque la raza humana no distingue
a veces la bondad de la avaricia
tomando la justicia por su mano,
de forma que cualquier pudor se extingue
de buenas a primeras con malicia
según los intereses del tirano.