En carne propia duele lo que agrada
se suele comentar, al enemigo,
de cuyo testimonio soy testigo
en una sociedad endemoniada.
Pues viendo los abusos en cascada
a comprender a veces no consigo,
como constato todo lo que digo
y pienso en referencia a la manada.
Será que aún callar apenas puedo
cuantas atrocidades se cometen
por los diversos puntos cardinales,
que si curado estoy yo ya del miedo
tampoco me aventuro a que me reten
los poderes mediáticos casuales.