Quien sabe si buscando la rosa de los vientos
de bruces los humanos se desploman de frente,
cuando sudores cuesta hallar que consecuente
nadie tras sus caprichos evite los tormentos.
Y es que existiendo a diario miles de enfrentamientos
a reflexionar nadie, se para de repente,
y si se le cuestiona, sin pegas los desmiente
sacando a relucir variados argumentos.
Pudiera ser que armados de múltiples razones
todos los seres vivos pretenden convencer
largando sus misivas al necio del vecino,
ya sea con promesas o con explicaciones
bastantes retorcidas, venga usted a saber
si al perder sus cabales, no perderá hasta el tino.