Sigo esperando
que vengas a mi lado
con tu sonrisa.
Y así lo haces,
llegando temblorosa
tras largo vuelo.
Estás cansada.
Tus ojos soñolientos
quieren dormir.
Y yo te pido,
te ruego que me digas
dónde estuviste.
Quizás más tarde,
respondan tus pupilas
desde el silencio.
Entonces duerme,
descansa en esta tarde
que ya termina.
Cuando despiertes
me contarás despacio
eso que guardas.
Y velaré tu sueño,
mientras espero ansioso
que tú descanses.
Aquí estaré,
comiéndome las uñas,
mi mariposa.
Rafael Sánchez Ortega ©
28/05/20
9 Me gusta
tan solo el arranque es ya tan bello !
Sigo esperando
que vengas a mi lado
con tu sonrisa.
El poema todo es de un romanticismo exquisito !!
Y yo te pido,
te ruego que me digas
dónde estuviste.
Quizás más tarde,
respondan tus pupilas
desde el silencio.
Felicidades !
1 me gusta
Gracias por tus palabras Noracris.
Un abrazo.
1 me gusta
Gracias por tu comentario Aljndro.
Un saludo.
1 me gusta
Gracias Marttucca
Saludos.
1 me gusta
JetSat
9
Me he enamorado de tan puntales versos pues nos traslada ha esa mezcla de agonía con esperanza , desde ese > ruego que me digas
dónde estuviste. hasta esa ansiedad *
comiéndome las uñas
Bellos versos. Saludos.
1 me gusta
Qué bella imagen de entrega, puesta en tu poema!!!- Muy lindo, poeta.
"Y velaré tu sueño,
mientras espero ansioso
que tú descanses.
Aquí estaré,
comiéndome las uñas,
mi mariposa."
1 me gusta
Gracias por fijarte en esos versos, JetSat.
Saludos.
1 me gusta
Gracias Lucía Gómez.
Un saludo.