Si entonces no se acaba

La vida es suficiente,
si entonces no se acaba
Santiago Feliú

Frágil como el titubeo que termina en quiebre
el hipo muscular, el nudo en la garganta
de la arteria aorta.

Frágil como el tejido que lo recubre
—a veces, tercamente, durante toda la vida—.

Frágil como el trazo del adolescente
y la timidez de sus hormonas.

Frágil el núcleo que nos sostiene, la maquinaria
cuasi perfecta y, por tanto,
endeble.

Frágil como el concepto «hasta que la muerte»
si es que la muerte apremia y se adelanta
al calendario propuesto.

Frágil la vida, que de repente
acaba.

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Leer este poema en un día como hoy, que me da de bruces con la realidad de esa fragilidad, me golpea en todo mi centro.
Pero, amigo, la poesía es bella y cruda al mismo tiempo y tus versos me encantan.
Escribes tan bien…
Muy bueno, Noel.

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Somos tan vulnerables. La vida es como un suspiro, en un abrir y cerrar de ojos como llega se va. Es un poema con mucha contundencia. Abrazos

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Mi querida @wallacegere. Días como ese, lamentablemente, hemos tenido mucho en estos tiempos. Por eso cada día que vivimos es para dar gracias, por los dones, por las amistades, por la salud, por la vida. El poema surgió de uno de esos días, que no me afectó directamente a mí, pero sí a una amiga. Un abrazo.

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Muchas gracias por el comentario, @varimar. No te falta razón en lo que dices. Es un suspiro. Por eso vale tanto. Un abrazo

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Versos tan bellos como sabios y reflexivos, así es, si tomáramos más conciencia de la fragilidad de la vida seríamos más felices y más generosos con nuestro entorno, poeta!!!

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Frágil, la vida. Fuerte, tu poema. Saludos.

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Magnífico poema… Un saludo.

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Mil gracias @Minada, @Magdalena, @Rraffa y Carmen_Cantos por sus lecturas y comentarios. Abrazos

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