Cae la tarde
el crepúsculo solloza,
la lluvia cala por dentro, muy dentro…
y se enciende la hoguera
que quema las vanidades
y los sueños no alcanzados.
Desciendo
por los peldaños que me llevan
al sótano de mi esencia,
camino un largo y oscuro pasillo,
al doblar la esquina
tropiezo conmigo mismo,
o alguna versión arcana de mi yo.
Afuera hay un bosque profundo
negro, demasiado negro…
y sus árboles desfallecen todos
teñidos de frustración y desencanto,
y el bosque es mi fruslera sombra,
la que me fue guillotinada
en un pasado arcano.
La noche
ataviada con su abrigo de húmedo invierno
camina hacia mí vociferando sus dicterios,
con paso firme, resoluto, pero cuitado;
y los murciélagos de la desesperanza
cual vampiros protervos
sedientos de sangre púrpura,
remolinean a mi alrededor.
A primera vista tres componentes atractivos sobresalen por la gran habilidad del autor, lo mistico, lo íntimo y lo fantástico, las imágenes. dividen el paisaje en dos proporciones desiguales, una surrealista dónde lo inesperado sucede con notoria extravagancia, llevando al lector a zonas no convencionales de un modelaje interior con implicaciones psíquicas; la otra parte sugiere una mirada expresionista donde las «sombras fueron guillotinadas » al sujeto lírico, y la emoción y el sentimiento toman el control sobre cualquier posible realidad colectiva. Un poema para reflexionar e indagar en sus profundidades —lo Aplaudo y felicito a mi amigo poeta @AljndroPoetry .
Wow… tu comentario es por demás impresionante, captas muy bien la idea primigenia, pero agregas aristas y dimensiones de evaluación y comprensión que impresionan sobremanera.
Es hermoso y profundo tu comentario.
Te lo agradezco inmensamente! Gracias amigo escritor !
Algo hay de eso José, esa dualidad entre el ser consciente y su inconsciente, las cosas que sentimos y percibimos en la superficie, versus lo que se cocina a fuego lento en nuestro interior oculto.
Me encantan este tipo de poemas en primera persona, tan introspectivos y a la vez tan hacia afuera, como estallando.
Es magnífico, Alejandro.
Buen finde, compi