Para Zuri

Heme muerto, muerto… ¡a ver si recuerdo!

Te conocí… en la sexta pecera del año.
A ti… que naciste con paréntesis en flor!
en lugar de irises
concéntricos
como los círculos
del más profundo
averno

Heme muerto, muerto… ¡a ver si recuerdo!

Te conocí… alma rebosante de destinos.
Destinos… que escapan del trasiego!
el ir de pecera en pecera
de gotera a gotera
por puro capricho
del que blande
al punzante Minutero

Heme muerto, muerto… ¡a ver si recuerdo!

Te conocí… en el límite de las apariencias
en el rellano donde ya no se ve más nada
que las mudeces del otro
las carcomas del otro
la bala
pensante
del otro

Recuerdo que te dejaste caer
como Altazor de sí mismo
y te arrodillaste en la sien
del Cristo del abismo
para divisar mejor la luz
que emanaba
pulcra
de la sombra
sin torso

Y recuerdo que
con un gesto de latidos
me llamaste para hacerte compañía
pero ¡oh!, ¡si bien sabías que,
la Madre Superficie,
preso, desde siempre, me tenía!
y tú, a bocados sordos,
al mustio tritón te comías…
al tritón! que iba en busca
de la Mítica
Fuga

Y sí…: bien sabes que hay un escape
mas no lo aceptarás…
media ala ya tienes fuera del Pozo
dime ¿qué haces aún acá?
Yo sé: me sigues con el pensamiento…
¿no te has de cansar?
a ti que no te duele pensar
a ti que no te duele que me duela pensarte
que estás AHÍ ABAJO
en el nudo de tu profecía
y que yo ESTÉ AQUÍ
decidido a nada
destinado a nada
NO PUDIENDO ASOMAR TANTO LA MIRADA porque ABRAXAS, cíclope, se nos interpone
al pensamiento visual
y me escupe
con deleite
al ojo
MÁS MÍSERO:
“¡HAZTE A UN LADO, TRIFRONTE!
¡¡HÁGANSE A UN LADO, FALSOS!!
¡¡¡EMBROLLO ADREDE!!!
ESTUVISTEIS PRESENTES EN TODOS VUESTROS FUNERALES…
¡DESVIARON A LA MENTE DE SU ROL MAQUINAL!
NO SOIS, Y NUNCA SERÉIS DIGNOS,
DE LA DESCONEXIÓN”.
Oh, me cuestiono
si el ojo derecho es el más triste…
ya no me cuestiono subir
los mismos escalones…: ¡YA BAJARLOS
ME ES IMPOSIBLE!
subir
subir
Oh, ¡si
bien sabes
que siempre habrá un arriba!,
mas no lo aceptarás…
EL DE ARRIBA SÓLO VE ARRIBA DE SÍ MISMO PORQUE EL PARAÍSO NO ES SINO EL PECHO DEL ABISMO
a ti no te duele pensar…
a ti no te duele nada…

Heme muerto, muerto… ¡a ver si recuerdo!

Tus alas originan el viento que desprenden las tumbas!
Tus alas empujan las nubes de la mansa lluvia!
Tus alas hacen temblar las raíces del Leteo!
Tus alas las tengo tatuadas en mi pecho…

Ojeroso de costras: danzan en mi pecho mestizo: diablos azules: ¡árida calabrina de rosas lloradas!:
¡¡He aquí tu lanza!!
¡Tú, que te quitaste la vida al contacto con mi seno!
¡Tú, que te caiste desde el costillar de un eclipse,
y no tuviste en mente otro lugar donde volver a recaer!
¡Tú, que tienes un lunar en el ojo izquierdo, que osas ver más allá del Caos, más allá de la cerradura!
Oh tú… sabes muy bien lo que haces…
sabes muy bien lo que no dices…
¿cuándo podré descansar?

Esta noche…
se reduce a un latido
a un latido y a una ausencia

Esta noche…
puedo decirte todo
y quedarás satisfecha

Esta noche…
quizá sólo esta noche
pueda serte infiel

Esta noche
no… esta noche es muy tú
para estropearla

No hay rutina…
sólo hay esta noche
que llega sin más

¡Hace tanto silencio…
que te escucho
mimar a tu gato

Quizá estés pensando
en mañana
mas no en esta noche…

Tu techo aspira sueños de nieve
toda la noche
toda la noche…

¡Razón siempre tuviste… Oh, querida Alejandra. ¡Escribo sin dormirme, escribo hasta el mareo… porque me es corto el día y larga la noche

¡Desamores, fuentes de contradicciones!

Sólo por esta noche
te daré el gusto
de callar…

Podrás observar
lo inútil
que es todo esto…

Llegado este punto
siempre me detengo
no alargo más la hora
no estiro más la hoja
quedan
quedan
quedan
quedan
quedan
caricias sin decir
monotonías
quimeras
cae
cae
cae conmigo
no nos encontrarán
si nos escondemos
a la mitad
de la
caída
y podrás
sentirte
arrebolar
sin tener
que
desaparecer
y yo
al fin
podré
ver
a
esta
noche
desllorar
tranquila…

Y si al verme lloras…
¡desentiérrame
y llórame encima!

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