Si no te encuentro,
viajaré a otros lugares,
seguiré a las nubes
someteré a todas las tormentas,
vaciaré el agua de los océanos,
sembraré el caos,
ladrarán todos los perros,
volarán sus criaturas marinas,
se rebelarán las bestias
someterán a la humanidad
y reinará mi tristeza,
y mi rencor será ley.
Cerrarán los cines,
llorarán los payasos,
se apagará la calefacción,
se borrará la tinta de los libros,
arderán las mantas,
se apagará el sol,
bajarán el telón las miradas,
arderán los bosques,
se secarán los grifos,
los actores olvidarán sus diálogos,
explotarán los coches,
se apagará la música,
las ensaladas no tendrán aliño,
chocarán los trenes,
se vaciarán las cajas.
Se borrarán las sonrisas,
los juegos de los niños,
el contacto y los abrazos,
el sabor de los besos,
el poder de la palabra,
las palabras:
familia, amistad,
compasión y hogar.
Y el sexo será sórdido.
Y el amor se quedará sin letras.
Y las pieles dejarán de ser un destino.
Y la desnudez será una maldición.
Y todos los dedos me señalarán,
recordándome que no estás
y olvidándome de que te has ido.