Aún le queda un botón abierto
al balcón de mi boca.
Abrocho como puedo
esquirlas en bronce
de conversaciones
a medias.
Revolotean como polillas
a la luz de un candil
las palabras que no pude entregarte.
En el umbral de mi puerta
descansa una duda,
hambrienta
como perro callejero.
A mi puerta llama el invierno
Aún espero
Con la boca empantanada
Y esta nada entre los dedos.
Me maravilla leerte.
Besines 
Ahhhh!!! Qué maravilla de poema, ese botón abierto en el balcón de la boca…
Mi niña , escribes con el alma y con las vísceras , y con el alma de las vísceras.
Una vez me dieron que era muy visceral…reivindico la visceralidad.
Un besito de chocolate…
Y qué maravilla tenerte en mi rinconcito, Marta. Un besito para ti 
Es como dije: abrir la Caja de Pandora, llena de alma y visceralidad. Y de dulzura, de alegría, de esperanza. Cabe todo en las letras del abecedario combinadas y en cadena.
Con qué ojitos más bonitos me lees, amiga 
Que bonito, tus versos me adentran en el incesante mundo metafórico, esta vez de la mano de la triste y angustiada de la nada!!
Gracias, Ana María
A veces la nada es un lienzo en blanco fabuloso para sacar los mejores colores.
¡¡Besitos para ti!!
Yo llego al umbral de tus versos y me cuelo en ellos de cabeza…como esa polilla que revolotea.
Me encanta leerte, amiga!
Aunque sea la nada, es precioso!
Besitos 
Pues cuélate tantas veces como quieras. Te dejo el candil encendido para que sigas revoloteando, amiga
Cariños de vuelta, Nora.
Un placer tenerte en mi rinconcito
Me gustó mucho tu poema, Saludos !
Muy bello este poema.
"Abrocho como puedo
esquirlas en bronce
de conversaciones
a medias.
Revolotean como polillas
a la luz de un candil
las palabras que no pude entregarte."
¡Muchas gracias por pasar, Horacio!
Un saludo entre tinta otoñal
Qué gusto tenerte por aquí, Lucía. Muchas gracias
Besitos de vuelta para ti
Me ha encantado. Me he visto muy identificada con este poema… los tres últimos versos se me han clavado. Bravo, compañera. Gracias por este poema. Abrazo!
Así me pasa con muchos de los tuyos. Hay pellizcos que son universales, y los que rascan por dentro, más.
Muchas gracias, Ze. Me alegra tu visita
ah, esas palabras que se quedan en el limbo de lo no dicho …
hermoso poema !
Revolotean como polillas
a la luz de un candil
las palabras que no pude entregarte.
En época de pandemia (y siempre) hay una que no debemos dejar en el tintero jamás.
Un abrazo bien grande para ti, Alejandro 
Revolotean como polillas
a la luz de un candil
las palabras que no pude entregarte.
Una imagen precisosa.
Dices nada y dices mucho . Una maravilla😀