Puños de sal en mi pecho,
las palabras ya marchitas,
la piel que ya se me enfría,
los ojos aún al acecho.
Mi paisaje desolado,
silencio de pico y pala,
trabajo que me amordaza
y quema y pudre mis labios.
Si en mi pecho muere el sol
y las miradas caen al pozo
de lo mísero y de lo obsceno,
muramos ahora tú y yo,
y dejemos a los demás el gozo
de volver a inventar lo eterno.
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Muy bonitos y sentidos ambos poemas, José Antonio.
Saludos 
P. D. Ah, se me olvidaba… Sé muy bienvenido, compañero 
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Muchas gracias Wallacegere!
Un abrazo
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Muy bonito poema, compañero! Mil gracias por aportar tu granito de arena a este Reto!
Abrazo!
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Muchas gracias por tus palabras!
Un abrazo
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Hermoso…

Bienvenido a Poémame, compañero.
Saludos, José Antonio!
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Bienvenido a esta plataforma de poesía poeta.
Percibo que tu poema destila una profunda melancolía y desesperación, con imágenes que retratan la opresión y el agotamiento. La sugerencia de un final conjunto transmite un sentido de resignación compartida y un deseo de escapar de la miseria cotidiana.
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Gracias por tus palabras Aljndro… Voy a reflexionar sobre lo que me dices…
Un abrazo.
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La despedida es tan amarga, duele tanto…Se siente en cada verso, corroe. Un magnífico poemame Enhorabuena.
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Muchas gracias por tu sentir!
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Muchas gracias por tus elogios, compañero!
Un abrazo.
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