Agripnia revuelta en desahucio,
cada loco con su tema,
Oganesón en tus zapatos,
las Galias antes de Julio Cesar
pero no tú…
otro plástico más
en el mar de basura,
desbordando ese trazo común,
tallando tu demencia
a quien la pueda notar,
Injustificando la sobredosis de karma,
deconstruyendo tus cenizas
entre gente y calaveras
que vienen y van.
Que potencia del reloj
del pozo de tus intestinos
los vaqueros sucios,
el viento helado,
cada cara tiene cruz,
un cespo a nada de reventar,
un meteoro filoso en los hombros,
un cóctel de antidepresivos,
ácido lisérgico entre los ojos,
y ese duelo litúrgico a muerte
de tu fantasía versus tu realidad.
¡Vaya robot imperfecto!
tus 8 horas solo son
un ratito de seriedad,
Un balde de agua con ponzoña,
Campanita para el cuervo,
un metabolismo artificial,
Mc sleeper
oficina- una mesa
Kiroshi- confluye la rabia
nuggets con acceso hacia al baño,
gasolina para el celular,
Mc sleeper, todo menos persona
con la desgracia más cerca
que la fortuna
carne de cañon
balístico centavo
sin futuro, sin progreso,
sin ningún metro cuadrado
un infrahumano desecho-
abandonando una sombra
por una tumba,
las ganas de ser alguien
mi propio entierro,
Y en todas partes,
sin la paz siquiera
de querer respirar.