Se explayan las risas en primavera
se esconden la lágrimas del invierno.
Ahora que cada capullo es una promesa
en la algarabía se distraen los versos
Solo los insanos llantos de mis manos
se me quejan hambrientos de caricias.
El dulce dht de tu piel las ha cazado
y solo por ella y en ella se envician.
En corrientes de cascadas desbocadas
tu ausencia mis lágrimas van limpiando
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