Las calles
atardecen vacías
fue algo en cualquier tarde,
una sombra detenida en la voz
un recodo de metal rutilante.
Fue un lugar del cuerpo
como quien hace memoria
y ahoga otra ilusión.
Las calles se repiten
se multiplican en los pasos de ayer,
ahora se contempla, ahora se desea.
Quien habla se ausenta,
quien voltea se pierde,
desde ahí podría volver.
Allá se afloja el viento,
será posible tener esa vista
aquel panorama de aire
ese otro punto alojado en la memoria.
Me parece que tu poema despierta una sensación de nostalgia y melancolía al describir la quietud de las calles al atardecer y la búsqueda de un lugar perdido en la memoria. Tus versos crean una atmósfera que invita a reflexionar sobre el paso del tiempo y la conexión con el pasado.
Yo hoy me quedo con este verso todo el día… Magnífico!
Muchas gracias, Magdalena, por tu lectura.
Un gran saludo.
Alejandro, te agradezco tu comentario con esas hermosas palabras.
Un gran saludo.
Tali, muchas gracias por tu compañía con el verso de Las calles que se repiten.
Un gran saludo.
¿Cómo no se van a repetir las calles poeta?
Si el atardecer se las traga en la sombra de las voces, si las ilusiones se ahogan en un lugar de mares en el cuerpo, si la ausencia no voltea jamás para no perderse en la flojera del viento. Aplaudo ese otro punto que @eternidad guarda en la memoria. Aplausos Héctor.
Un panorama de aire y de calles pobladas de poesía. Buen poema!!
Domingo, muchas gracias por acompañar con esas voces que ilusionan.
Un gran saludo…
José, muchas gracias por tu lectura y comentario.
Un gran saludo.
Todo se repite cuando hay ausencia. Bellísimo poema. Felicidades
Muchas gracias, por tu lectura y esas hermosas palabras.
Un gran sudo.
Hermoso poema, se siente esa desnudez de la ausencia en esas calles vacías…
🩵🩵
Un abrazo, Héctor.
Muchas gracias, María, por tu lectura y compañía por esas calles que se repite.
Un gran saludo.