Tuve tanto de qué hablar
en cada silencio tuyo,
que, mudas, las palabras se atoraban.
Llené de graznidos la garganta.
Luchaba…
Mas la guerra
no había hecho más que comenzar.
Después vendrían mil batallas…
más.
Y tú seguías sin hablar,
y yo no hacía más que sangrar
en una tierra de nadie.
Una línea dividía
tu media parte y la mía.
Lo sé, me querías,
pero no era suficiente.
Y diste un paso al frente.
¿Hablarías?
Recordé aquella rima de Bécquer… “¿Por qué callé aquel día?..”
Sacaste al fin bandera blanca.
¿Te rendías?
Y soñé que al desplegarla
tus versos delatarían
sobre mi nombre tu amor
en ese retal de algodón,
y que entonces me dirías… “¿Por qué no lloré yo?”
Pero yo estaba despierta
y esa no fue tu respuesta.
Ni una lágrima en tus ojos,
ni una palabra en mi boca.
Tu vocabulario es precioso y la combinación que haces de las palabras, perfecta. El amor recuerda, a veces, un campo de batalla, una guerra, y amar/dejar de amar/perder al ser amado se concibe a veces como rendición, derrota. Y decir adiós, es complicado. Pero en el poema lo reflejas maravillosamente . Me gusta mucho. Un abrazo
Tienes una manera tan particular de reflejar sentimientos algo fuera de serie. El tono del verso si lo pudiéramos medir es invariable y al mismo tiempo, devastador…sufrir en el amor , aprender a dejarse la piel en un ultimo intento y aún así, sabiendo lo imposible a veces esperamos…
Al final de la batalla, sólo quedan los cadáveres de lo que pudo haber sido y la soledad de los cuervos, que hurgan en las entrañas expuestas al dolor por lo perdido. Muy buen poema al desamor. Un saludo.
Uff tus versos son la viva realidad de un sufrimiento de desamor y desilusión, las esperanzas, el silencio, el tiempo para caer en el adiós, transformando el deseo en un bello recuerdo, se viven paso por paso, amiga!!!
Ese muro invisible que se interpone a veces…imposible derribarlo en la contienda.
Gran poema de esas guerras del sentimiento que no conocen el armisticio, sólo la derrota…
Hermosos versos, amiga!
Un abrazo fuerte y buen día.
¡Por tu madre, Walla! ¡Qué manera esa que tienes de escribir! No sé, si un poema, un relato o un cuento, pero he leído tres veces tu LÁGRIMAS DE NADIE, primero normal, después despacio y por tercera vez desentrañando palabra por palabra, meditando profundamente y sacando conclusiones de esa fuerza que hay en tus poesías y sobre todo, en ésta. El amor es tan complejo, y la comunicación tan necesaria, que si no es a partes iguales, se nos llena de dudas, y esas dudas a veces nos llevan al abismo con acciones que conllevan a una carga de conciencia tan grande de la que no nos podemos desprender durante el resto de nuestras vidas. solo por no saber si llevábamos o no razón por el solo hecho de no apreciar en toda su magnitud a la contraparte amorosa. Porque el amor es misterio, y hay quién ama, y lo hace tan fuerte y profundamente que no lo expresa por considerar que la persona amada lo sabe y que no debe dudar de ello, aunque no se lo diga., Eso es muestra de que con silencio, también se ama. Y te puedo decir más, el amor más grande de todos es el que se ofrece desde el corazón, no desde los labios. Y los que aman así, son los que más sufren, aunque no viertan una lágrima, porque también lloran por dentro y eso los mata en vida. Te hablo de ésta manera, porque tengo experiencias de lo que te digo. Me ha inspirado leerte hoy y escribir al respecto. Lo dejaré para mi, como tarea pendiente, sin apuro.
Hay una frase de algo que todos exigimos desde tiempos inmemoriales: <Hechos, no palabras>.
En el amor, y con esto termino mi comentario, la hipocresía y la mentira son las que llevan la voz cantante. Son destructivas, traicioneras, asesinas y lo hacen con bombos y platillos, mostrando la imagen que necesita ver la persona que se cree amada. el Mundo es así
disculpa un comentario tan largo, pero sincero y abierto.
Un fortísimo abrazo, mi Walla.
Tanto amor se convierte en silencios que a veces duelen, otras curan, porque de él se hacen barreras que a veces es imposible de romper. Profundo y bello poema. Felicidades