Una creciente nostalgia del ayer
le avisa que está viejo
el mismo recuerdo a cada rato
el andar dispar
desorientado en el tiempo
papá no está en la casa
está nostálgicamente perdido
impera el enojo
se pisa la raya de la ira
la bondad de sus ojos
hacen recordar quién era
el tiempo asesino no tiene piedad
lo maltrata
su destino lo lleva entre otros
ya no conoce
se aferra a la vida con pequeñas dosis de alegría
con sonrisas tímidas
que afinan su tranquilidad
amigo de todos
despierta cada mañana
en la soledad del desconcierto sin esperanza
y Dios lo espera en sus brazos.
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Muchas gracias María, duele en el alma saber que están pasando. Mis saludos compañera.
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En la Biblia se encuentra una frase para dar honra a la persona envejecida, se refiere a la canicie como: “corona de hermosura”… Porque a pesar de todo lo amargo que arrastra este último tiempo de la vida, son nuestros viejos quizás los seres que más amamos, y quienes más nos enseñan del valor de amar y la clave de vivir… Buen escrito, sin duda se ve claro tu amor y respeto por ellos, excelente. Gracias por compartirlo.
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Gracias a vos por leer mis escritos que no son nada más que sentimientos y pensamientos que la vida nos va dejando.
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