Mi psicóloga me ha pedido que haga una lista de todas las cosas que soy y, aunque llevo intentando sacarlo semanas, no me sale nada; aún así, me las he apañado para hacer un poema
el sonido de mis dedos
contra las aspas del ventilador,
los nudos en mi cabeza,
las uñas que me faltan,
las llagas que me sobran,
las caderas que se van,
las estrías que vuelven
y cogen velocidad,
la sangre que cae por mis muslos,
el vello de mis piernas,
el tobillo de un pato,
las rodillas de una niña,
la menta entre los dientes,
los libros que devalúan
mi estantería,
los muñecos del armario,
los cadáveres que he enterrado
y caminan por mi lado de la acera,
la primera lluvia de verano,
el primer día de tormenta,
la ciudad y las afueras,
un árbol y el cemento,
los opuestos que se atraen
y no se aguantan;
la muerte de mis sentidos,
la vida a la sombra,
el amor que gasta mi tiempo,
el odio que lo rellena,
la traición de mis manos,
los días que no me toleran,
las noches que me han hecho daño,
todas las desgracias que han escrito
sin mi consentimiento,
el objeto usado,
un objetivo perdido,
la reliquia más valiosa,
mis venganzas peor ejecutadas,
todas las cosas que nunca he dicho,
todas las voces que he quitado,
todas las chicas de las que me he enamorado
y los poemas que se han quedado
a las puertas del éxito,
las crisis que golpean mis huesos,
la existencia que se acumula,
mi herencia en monedas antiguas,
las estrellas que se conocen,
el universo en un mal día,
los planetas que juegan
en mis fronteras,
la cruz en mi pecho
de un tesoro mal escondido,
mi nacimiento en lunares,
todas las cosas que no recuerdo,
todo lo que no he sido
y no pertenece a este poema.
soy todas las formas
de destruirme que conozco
y todas las maneras de quererme
que no tengo,
como un punto de encuentro,
una zona gris en guerra:
un gato,
un lince,
un lobo,
el tacón del hombre,
la corbata de mi feminidad,
un papel a medio tirar,
el bolígrafo que mancha mi lengua,
feroz, frágil y fascinante,
la amante que no sabe hacer una cama,
el mar en color rosa,
las nubes que he contado,
la más pobre del cementerio,
toda la riqueza de las cosas.
: What are you so afraid of — Videoclub