La cena

Resuenan las voces arrastradas.
La ciudad, ajena,
queda bajo los escombros de la luz.

Dentro de nosotros,
hay cabezas asomadas a la noche,
pero conservan los ojos cerrados
y reptan por las horas casi sin voluntad.

Se desmorona
la felicidad de vidrio
bajo el roce sutil de una mariposa;

se hace pedazos.

En una mirada plana, nos besamos.

Es la hora de cenar,
pero los charcos grises reflejan cansancio.

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El cansancio de la ciudad, del día, de la vida. Precioso!!

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Verdaderamente bonito! :smiling_face_with_three_hearts:

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Un poema de claroscuros…precioso!!:rose::rose:

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Precioso el poema, Ze
Me encantó

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Mil gracias, compañero! Abrazo!

Muchas gracias, artista! :slight_smile:

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Gourmetpoesía! Ja ja ja! Me encanta! Muchas gracias!

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Agradecida, compañero! Abrazo!

“Se desmorona
la felicidad de vidrio
bajo el roce sutil de una mariposa”

“Bajo los escombros de la luz”

La sobre estimulación que mas bien duerme los sentidos.Sería tan bello aprender del silencio y sus penumbras querida poeta!Magnífico!Abrazos Ze.

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Reflejas verdaderamente bien el tedio de la existencia. Me encantó… ¡Aplausos! :clap: :clap:

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Muchas gracias, bonita, por tus palabras. Un placer que te haya gustado! Abrazo!

Mil gracias, compañero! :slight_smile: Abrazo!

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Precioso poema, amiga
Me encantaron todos sus versos.
Agradable lectura

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Qué bonito… mil gracias! Abrazo!