Despierto al alba
tibia en mi cama
degustando la miel
del verso.
Desayuno Poesía
en ese amanecer de
cielo hermoso
y sol de reflejo cristalino
dando vida a la vida
como un mayo florido.
En el cuerpo alma y
en el alma poesía.
El tiempo en la espiga
anida en su anillo
con su dorado brillo
y ráfagas de oro y grana
sacudiendo al viento.
No es casual esta algarabía
que me deja la Poesía.
con aroma de piel
que aviva recuerdos en mi.
Apetito voraz de palabras
acariciando emociones
en estela de plenitud.
¡Oh, quien pudiera
como la naturaleza
ser goce y alimento!