Habitación,
Camina en la oscuridad,
quizás nadie abra la puerta,
sus sueños en un hilo,
sus besos aun giran,
dispersos, como en tormenta,
los silencios
escapan por esa chimenea.
Entre espacios vacíos
aún quedan palabras
confesiones, caricias tibias.
La brisa, más calma,
quiebra nuestra piel.
Los besos, sabor agua salada,
como olas,
jugando con la orilla.
Desnudos, dispersos, cómplices,
como semillas fecundas.
Despedida,
copa burbujeante de vino,
esperamos el encuentro,
el amor parece un salto al vacío,
y deja tu espíritu,
tu cuerpo,
una herida cerrada al azar.
Hay esperas que parecen despedidas,
cuando el tiempo se aferra al miedo.
Habitación vacía,
quizás,
debemos lavar heridas,
antes de encender
la luz de nuestra habitación.