Estoy bajo un hechizo de una gitana,
que con su sonrisa me hipnotizó,
y con su hermosa mirada
penetró mis más íntimos secretos.
Su rostro parecía el universo,
sus mejillas llenas de estrellas,
tenía dos radiantes soles
y una sonrisa de luna.
Solo bastó un beso suyo,
para que su hechizo hiciera efecto,
sentí como mi sangre se convertía
en un mar de agua salada.
Solo bastó una caricia suya,
para electrificar todo mi cuerpo,
borrar todas caricias pasadas
y llenarme de nuevos recuerdos.
Estoy bajo el hechizo de su voz,
ella detiene el tiempo o lo acelera,
ella me congela o me derrite,
ella me llena de vida o me mata.