Y de repente, un día la vida te invita a florecer… Y renaces… Y te expandes… Y todo es diferente.
El tiempo se detiene para que tomes con calma tus pétalos de colores, y te conectas con el amor que sientes.
El cielo se abre luminoso, te saluda y te cobija… El más bello sol se hace presente.
La tierra late en ritmos de alegría al contemplar tu alma florida y dichosa… Te observa tan reluciente.
Y el universo es más feliz con tu brillante presencia… Y una nueva estrella se enciende.
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Ah qué bonito … uno lee este poema y la pradera se hace más verde y las margaritas más blancas y el sol más amarillo !!
Ha sido grato leerte poeta !
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Un hermoso poema lleno de optimismo y esperanza.
Saludos, Francisco.
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Muchas gracias por tus palabras, compañero. Un abrazo 
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Gracias de corazón.
Me gusta poner atención en las cosas positivas. Un abrazo 
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Gracias, amiga.
Mis textos y libros suelen estar basados en mensajes positivos.
¿Tienes publicado algún libro?
Un abrazo
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