…
Por la puerta abierta entraba el olor a la noche, suave aroma floral
y la sombra de mis actos ya no eran agradables, giraban al otro lado.
Dormiré un poco, cada detalle me aburre. Cada campo está solo
y es ahí que mi corazón aúlla enloquecido de que sea verdad.
[…]
continuará