Está Pasando

Los hombres, no podíamos salir sin el chaleco y la cabeza tapada. Según el color de la M, que estaba inscrita en cada chaleco, significaba el grado de machismo cometido, y según su color te asignaba lo que podías hacer. Las mujeres tenían el mando de todo, se organizaban por comités, y claro los hombres no teníamos ningún derecho a estar, ellas lo decidían todo. Todo estaba escrito en la Fémia, un código que servía de culto y guía de conducta, para ellas y para nosotros como debían ser los castigos.
.
.
.
.
.
.
Esto no una fantasía, solo dale la vuelta, está pasando.

4 Me gusta

Érase de una muy respetable logia de señores onanistas,
todos ellos con el miembro bien apretado entre el índice y el pulgar,
que tejían ilusiones de futuros distópicos en el que las doñas les hacían a ellos
lo mismo que sus congéneres llevaban haciendo por siglos.

“Esto no es una fantasía, solo date la vuelta, está pasando” -me dijo uno.
“Pajas mentales” -le contesté yo.
“Ya verás cuando suceda” -vociferó.

Pero en su voz había un deje de esperanza del que tal vez no era consciente.