¿Escuchas?
Mi mano busca tu entraña y la perfora.
Dios siempre está aquí,
en esta soledad que ignora la esencia de la bruma.
Suena alguna campana y parece que llora.
Ya los días de agosto se van aposentando
y hacen fila en el tiempo.
¿Escuchas?
¡Ha muchos años que mi voz no suena!
¡Ha muchos días que la vida duele!
Es tarde y mi alma siempre huraña
olvidó que el amor ya no pernocta;
que un beso tibio me vuelve la calma
y un abrazo cálido la tristeza aleja.
¿Escuchas?
Es un barco que zarpa
y un poema me tiende
sus alas en la aurora.