Es normal que me duela la cabeza

Es normal que me duela la cabeza
Es normal que precisamente me muela
que de esta forma se me enquisten las venas
de ésta corona del puro ensayo y error
Y claro
Cómo no
Normal es la mirada a medias
La mirada en falso
Indiferente en suma imparcial
Como si normal no fuese que se llenara de agua
Que los ojos se inflen de lágrimas
Completamente normal que suspiren
en cierto tiempo no cardíaco
Boquiabiertos
Dejan alguna que otra mosca respirar
Aunque lo normal es que retornen a la
jaula de la rifa post-mortem
Y claro normal también es que bascule las
sienes se han atragantado un ave de conciencia
Pájaro soberbio
Otro par de oídos que ni las piedras logran taponar
Es normal que me hable la cabeza
Es normal que me responda la cabeza
Es normal que por mí responda y que por mí vuelva a preguntar y sea tercamente cabezuda
Normal que no pueda disparar al ave
Se ha quedado a medio camino
Entre sien y sien
No tan a su gusto
¿Habrá puesto en mí un feto de paloma?
Oh me retortija la cabeza con sólo pensar
fríamente en la vaga posibilidad de que
el dolor la cronicidad dolora el recurrente dolor de incomunicación total sea el de un bloqueo humano
Normalmente
el gallo trata
trata
convulsivamente
impulsivamente
de indultarse
de agitar sus alas tardas
de querer estimular el disparo de confeti a fuego lento
Entre sien y sien
Es normal que se me desencaje
La cabeza
Y que el alma asome cabeza y
prolifere brazos que en silencio se
crispan hasta el priapismo por nada más que pura defunción clorofílica para luego
Regurgitar fuera al reloj mandatorio
Aquello que no sólo atolondra a mi existencialismo estrictamente craneofacial
sino que también croa y se impacienta in vitro
dentro del fruto que no del todo despeña
dentro del órgano religioso e irracional
Es normal que me duela allí también la cabeza
Es normal que me duela
Justo en el pecho
Justo en el pecho
Justo en el pecho
(Se produce el eclipse y duele)

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Me parece que tu escrito explora el dolor y la complejidad de la mente humana de manera profunda y poética. Tus versos juegan con las nociones de normalidad y anormalidad, y abordan temas de comunicación, bloqueo emocional y existencialismo. La metáfora del dolor que migra desde la cabeza hasta el pecho añade una capa de profundidad a la experiencia.

Excelente tema y retórica.