Esa sensación de búsqueda que siempre nos acompaña… bueno… a unos más que a otros pero supongo que es la sensación de que el mundo podría ser de otra manera y la vida más amable para muchos. Besitos, amiga.
Quizás un final sería el nacimiento de la muerte, digo, si es que hay algo después de ella ( lo cual es poco probable).
Un poema de signos caudalosos
estuvo muy bien llamarlo
“Eantre Ríos penumbrosos”
Pues sí… podría ser un final el nacimiento de la muerte o el de un cambio radical en este mundo… el cual en ocasiones pienso que no nos vendría nada mal llegados al punto en el que estamos. Quizás un cambio de conciencia… Me alegra que te hayas acercado a estos ríos penumbrosos, Domingo. Gracias!