En la sonrisa del trueno

Fuimos tontos, lo sé

y no me arrepiento,

en realidad lo bendigo,

y de nuevo te quiero -;

y por quererte -

me he vuelto loco y también mendigo,

el mundo endulzado con tus labios finitos,

el ermitaño dolido con todas tus huellas,

el niño que juega con su cometa encima de la cornisa,

del tiempo que no cura nada y te dibuja:

en la ciencia que no devora este cuerpo

Porque ya no te extraño -

en el fresco y el primer café que recuerdan tus pupilas,

en la vida que explota -

explicando a las sombras,

que apareces en sueños,

mientras compongo un nosotros,

y en la sonrisa del trueno,

cuando llueve salvajemente en este corazón

sin salvador ni moradores,

en el silencioso rocio de las estrellas,

Y en el Octubre de mórbidas noches…

12 Me gusta

Brutal poema. :clap::clap::clap:
Gracias siempre.

1 me gusta

Buen poema. Gracias por facilitar su lectura.
abrazos

1 me gusta

Todo un hermoso poema.:heart_eyes:
Saludos, Lubdikar!

Es lo que tiene el amor que te envuelve en locura y te viste de mendigo, bellísimo, poeta!!:clap::clap:

1 me gusta