Verbotante es
el que navega por entre los verbos
y pesca de la oscura maraña del agua
algunas frescas palabras
jamás oídas.
Y es así como los lunares no son
luneros, aunque tienen algo de lunoso,
que es solo alunado en la forma.
Y un pez frío y acuoso tiene algo
como de hílico, como de ababado,
que no llega a ser níveo o baboso.
Y parir palabras no es tanto como parir
sino como entificar, como dar Ente
a lo que viene de la Nada.
Y los mares profundos oscilan de miedo
porque están aun preñados de palabras,
y el Verbotante se va a más oscuras aguas.