Gota de silencio,
armadura transparente,
eres la mano silenciosa
y la gota de un mar
creciente entre sonidos,
del ave sin sombra, y la costa.
Pirámide horizontal
en que todo toma aliento,
en que vuelve a ser todo,
y adecuas tu celeste manto
a cada espacio
y a cada ser .
Temprano y fecundo silencio,
respiro eterno y sin final,
triunfo de la calma
entre lo soberano
de campos abiertos
en que riges tus nacimientos,
y llegas y partes sin aviso.
Eres lira expectante y absoluta
de voz imperiosa.
Tuyo es el camino de los años,
tuya es la multitud
y el movimiento del reloj,
emergiendo sin descanso,
deparando
el porvenir que escondes.