Un día clausuró su vida
se fue detrás del más allá con sus sueños
y sus ojos sin brillo
se cerraron para siempre
Cansada, muy cansada
se marchitó por sus largos días,
buscó en el infinito cielo
su borroso Dios que la emboscó,
le abrió con amor los brazos
y ella sin pensarlo
se durmió en su regazo
Ríos de llanto en cascadas
cubren las casas las calles
el jardín los rostros la vida
y las manos se niegan a dejarla ir
Ese triste día
sus rosas lloraron
incansablemente
espinas…
Un día para recordar llevándose todo tu cariño y dedicación en tan profundos y dolorosos versos, sentido reconocimiento pleno de amor y recuerdo, siempre en tu sentir, amiga!!!
Gracias mi amiga por tu acertado comentario. Lo único que tenemos seguro es la partida, sin embargo eso no impide que duela el corazón.
Te envío un abrazo enorme
Es cierto, eran sus flores preferidas, seguramente ahora mismo debe estar en un jardín florido, sabiendo cómo le gustaban las plantitas.
Gracias por acompañarme. Abrazos
Gracias mi apreciado Maw, tengo el mejor maestro en elegías, tu tienes la mejor pluma en poemas con el más puro sentimiento en partidas. Más de una vez me has sacado lágrimas. Te agradezco tu comentario y compañía. Abrazos para ti y los tuyos
Es cierto, solo hay que esperar que el sol salga de nuevo y con ello llegan los buenos recuerdos que sustituyen la tristeza de las pérdidas. Aparece el sosiego y se calma el corazón herido. Te agradezco mucho tu compañía. Abrazos