Detrás de la dama de diamantes
el digno dueño de la duda
derrama su deseo de declararse.
El día deslumbra detalles dóciles
y con dramático destino
desnuda diosas del desierto.
Dos docenas de diciembres
y diez domingos deliciosos
ya han dejado de doler,
decidida a dejar la danza
de los diablos del dinero
debutó en descansar denso,
dijo que debía dormir.