La bendita enfermedad
que llega en el momento inoportuno
y es tan bienaventurada, la muy ella
que nunca arriba sola:
siempre trae sus racimos
de dolores satélites
como el incordio
de una incomodidad difusa.-
Chane García.
@ChaneGarcia.
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¡Tan real!
¡Tan inevitable!
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