Dicen que las paredes todo escuchan
y ante el menor descuido lo publican,
que con mucho estupor lo certifican
si los misántropos del clan achuchan.
Será que quienes sin criterio luchan
por lograr el poder se multiplican,
aunque a menudo por mandar se pican
y cualquier comentario se lo embuchan.
Por eso mucha gente cautelosa
no presta ya atención a comentarios
que por el mundo corren hoy sin tino,
capaces de llevarnos a la fosa
siempre que en boca estén de mercenarios
que piedras nos pondrán en el camino.