Era una vez una estrella
escondida entre las páginas
de un libro de poemas*.
Era una vez una luna
que alguien atrapó
para escribir
una canción de cuna.
Era una vez un sol,
pintado en la pared
del cuarto de una niña,
con todo el amor.
Era un hombre
que pintó en la pared un sol,
escribió con la luna
una canción de cuna,
regaló un libro de poemas
y escondió entre sus páginas
una estrella
para que la encontrara
su niña bella.
Y ahora que él le falta,
la que se esconde
de las noches estrelladas,
es ella.
(*Las mil mejores poesías de la lengua castellana).
Que bonito, que tierno, que nostálgico, alguien que siempre guardaremos en nuestro corazón cuando nos leían de niñas cuentos infantiles, muy entrañable amiga!!!
Sí, María, mi padre . De él nació mi amor por la poesía. Recitaba como nadie. Y era una enciclopedia andante .
Muchísimas gracias por apreciarlo, amiga.
Feliz día .