Soplaba el viento las sonrojadas mejillas, de una solitaria amapola.
Reclinaba el sol sus ojos sobre el ombligo del alba: pestañeaban las nubes, toreaba el viento a las hojas y al recuerdo,
haciendo crujir el silencio…
Discurría la sangre del verso, sobre el canto rodado del río.
Besaba la arena las huellas, bebía la hierba de los ojos llorosos de la aurora.
Ramificada poesía en el tronco del sauce, dura es la corteza que envuelve los años y castiga a la inocencia.
Temerosa la rama que parte el camino, dejando huérfanos los pasos.
Manos de arena, ojos de lluvia, corazón inerte, tú, yo…
Y este inmenso latido ocre.
Danzan las huellas,
son sus ecos de otoño
Oda sin voz.
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No manejo la técnica, pero veo que los Haibun son una cosa preciosa! Mas o menos intuyo de qué se trata… Y este es una hermosura en lirismo, los paisajes y los sentimientos que transmite, las imágenes! Todo completo me atrapa!! Una maravilla mi lindo girasol!
Muchos aplausos, besitos!!
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