Vagas auroras
rompen en mi ventana
y anidan
en mi balcón.
Vagan las horas,
sonrisas quemadas;
me arrullo con tu visión.
Llueve la angustia;
respiro nostalgia.
Mi otoño está por llegar.
Cantas tus sueños;
crecen las olas.
No caben en mi corazón.
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Dicen por ahí que “Hombre prevenido vale por dos”. Ya listo para la entrada del otoño.
Saludos cordiales.
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Me gusta mucho leerte. Siempre. Tienen tus poemas un sellito propio que los hace únicos. Soy fan.
Abrazo!
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¡Hola de nuevo! Gracias por leer. Tu comentario me motiva a seguir escribiendo.
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Bellisimo poema,Jorge!un afectuoso saludo!!
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Qué bello.
Me ha gustado mucho.
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