Recibir no pretendo condolencias
y aún menos sentirme derrotado,
si a diario me despierto de buen grado
agradeciendo todas mis esencias.
Si tras pasar por cientos de experiencias
presumir no pretendo yo de honrado,
sin pecar a lo sumo de pringado
lo que venir me viene ya de herencia.
Quiero pensar que a base de ejercicio
experto soy consciente en mantener
por narices intacto el don de gente,
aunque piense que tanto sacrificio
conmigo nulo deba proceder
teniendo al enemigo frente a frente.