De cambio en cambio
resistiendo,
y una hiriente noticia
lo aclara todo,
lo define,
lo arrasa.
Remendada con hilos de esperanza,
halos de luna
formados por recuerdos,
que debí desechar
hace tanto
y tanto.
Huyendo del daño
con las alas rotas.
La distancia no ha curado
tu hechizo,
pero ignorarte
hará un poco más fácil,
el olvido,
el soltarte.
Hilos de plata y bronce
coserán mis heridas
que ya no sangran,
flotaré como pluma en el aire,
y quizás algún día
se acabe la añoranza
y me atreva otra vez
a sonreír.
Versos que duelen con sus alas rotas y es que el amor duele y mucho aunque siempre puede volver a brotar cuando menos se espera, muy bellos a pesar de su dolor, amiga!!!
Muy hermoso tu poema, Alda!Deja en el aire un regusto amargo…pero muy bello.
La alas rotas pueden volver a volar…
aunque no sea igual que antes.
Abrazo fuerte!!