Parece que ha pasado el tiempo y la espera ha dado sus frutos,
Que te veo y no siento nada, que me ves y pasas de largo.
Estrellas fugaces que se desvanecen en un cielo oscuro,
Sin que nadie se de cuenta de lo que acaba de suceder.
Y es que resulta que mi subconsciente ha pasado de página,
Que ya no te pienso en cada luna llena aunque vea anochecer a tu lado.
Que soy capaz de navegar sin naufragar en mar abierto,
Abriéndome a volver a empezar de cero este cuento perdido.
Vuelan en círculo las palomas y es que no encuentran rumbo,
Han perdido el norte al haberte echado a ti de mi mente.
Pero ahora vuelan alto, sin importarles qué pasará si dejan de batir sus alas,
Si se mueren de sueño en tan largo viaje al descontrol.
Piso tierra fuerte, seguro de lo que hago tras haberlo conseguido.
Mírame, al fin te he olvidado. Y eso solo puede significar una cosa:
Que ya puedo, de nuevo, volver a imaginarme una vida contigo;
Un deseo, un vicio, un bucle sin fin en el constante caos que hay en mi.