Algas marinas

Algas marinas
acercan las resacas
hasta la orilla.

Olas gigantes
que llegan resignadas
y adormecidas.

Olor a brea,
a yodo y al salitre
de los océanos.

Y en medio el mar,
el centro de la imagen
y el pensamiento.

Todo te embriaga,
te abraza, te subyuga
y hace soñar.

Y tú sonríes.
Estás de vacaciones
y es lo que importa.

Atrás dejaste
la vida y ajetreo
de la ciudad.

También las prisas,
las dudas y el esfuerzo,
del día a día.

Pero conservas
las tiernas mariposas
en tus pupilas.

Y ellas te harán
sentir nueva alegría
junto a la mar.

Rafael Sánchez Ortega ©
11/07/22

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Un buen poema que dibuja la inmensidad de los mares; me hizo recordar el cuento del ñajo que vió una sirena en la playa un atardecer y se hizo asiduo visitante solitario, y cuando el preguntaban —¿A donde vas ñajo?
Respondía:
— a er algas arinas.

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Es bonito ese cuento, Lúdico.
Gracias.

Bonito poema con aroma marino de algas… Saludos, Rafael!

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Gracias María.
Saludos.

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