Hoy tengo un secreto
un secreto sobre ti.
Ahogada en lo ajeno,
te invoco cuando quiero
cuando quiero y deseo
vuelves a mí.
A veces cuando quiero
puedo ser paciente,
puedo ser tu amiga,
puedo ser tu amante.
A veces cuando quiero
darte un beso en la mejilla,
darte un beso en la boca,
darte un beso en la pupila.
Porque si en el libertinaje actúo, amor
sin preocupación alguna,
significa que estaré perdida
que en las manos de los hombres
me encontraré sumergida.
A veces cuando quiero
ser un estandarte firme y duro
apaciguar la vehemencia
entregarme sólo a uno.
Pero es que el ave nace
para recorrer el sendero,
para recorrer las colinas,
para beber de los riachuelos.
Y si en mi banalidad,
a veces cuando quiero, no.
Subversar la realidad
porque a veces cuando quiero, no.
Para mí, que las ambivalencias son la maravilla que se anquilosa conforme los años pasan y que me saca verdades de los dedos todas la noches.